SC – Sahel – RO EA and SA

Contribuciones especiales

Sahel

Reflexiones del Coordinador Especial para el Desarrollo en el Sahel, Sr. Abdoulaye Mar Dieye

Definir el futuro del desarrollo en la región del Sahel a través de alianzas entre
voluntarios y voluntarias jóvenes y el gobierno: una oportunidad que no debe desperdiciarse

El voluntariado es el ejercicio de una entrega desinteresada, principalmente por parte de las personas jóvenes, que aspiran a ver un cambio significativo. Este ideal está arraigado en la labor de las Naciones Unidas y es consustancial a la labor de la estrategia integrada de las Naciones Unidas para el Sahel (UNISS) y su Plan de Apoyo.

En el Sahel coexisten múltiples realidades, a menudo antagónicas. Por un lado, son patentes los retos humanitarios y relacionados con la paz y seguridad, y, por otro, es una región rica en recursos humanos, culturales y naturales, con un inmenso potencial de crecimiento.

En este contexto, la entrega desinteresada de sus jóvenes puede contribuir de manera muy significativa al logro del desarrollo. Las personas jóvenes representan más del 60% de la población de la región, y son sin duda el mayor activo del Sahel. Entonces, ¿cómo pueden los gobiernos de la región, junto con otros asociados y asociadas, aprovechar mejor la capacidad de las personas jóvenes de todo el Sahel, muchos de ellos voluntarios y voluntarias para el desarrollo?

A fin de sacar partido del potencial de la región y contrarrestar la imagen negativa asociada con el Sahel, las partes interesadas necesitan involucrar a la juventud en el desarrollo. Consciente de lo anterior, el UNISS, que tiene como objetivo dar solución a los retos estructurales del Sahel, ha evolucionado considerablemente en la articulación de formas ambiciosas que buscan abordar las causas profundas de las crisis prolongadas y el subdesarrollo en la región. Para ello, las personas jóvenes del Sahel, muchos de ellos voluntarios y voluntarias, son un recurso inestimable.

El voluntariado es una causa noble que puede beneficiar a la población del Sahel. Los jóvenes voluntarios y voluntarias son agentes de transformación con disposición y preparación para contribuir de manera significativa al progreso en sus comunidades. Una de las maneras más eficaces de materializar el desarrollo de la región es establecer alianzas con ellos y ellas para que respalden el desarrollo de sus respectivos países.

De hecho, las personas jóvenes del Sahel han estado a la vanguardia de la respuesta a las diversas crisis de la región y han hecho numerosas contribuciones a su desarrollo, paz y seguridad. Como parte de la respuesta a la COVID-19, por ejemplo, 170 Voluntarios y Voluntarias de las Naciones Unidas —la mayoría mujeres— apoyaron a las Naciones Unidas y a los Gobiernos de Burkina Faso, el Chad, Malí, Mauritania y el Níger a la hora de abordar las necesidades que iban surgiendo.

El Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres, hizo un llamamiento a todos los gobiernos para que promovieran el voluntariado, apoyaran las iniciativas voluntarias y reconocieran las contribuciones de los voluntarios y las voluntarias al logro de los ODS (Objetivos de Desarrollo Sostenible). Para establecer las vías de desarrollo de los países del Sahel, los gobiernos de la región deben reconocer el lugar que ocupan el voluntariado y la juventud, y, a fin de que todas las partes salgan ganando, el voluntariado debe tener un papel protagonista en los esfuerzos de desarrollo.

Como reconocimiento a las importantes contribuciones de las personas jóvenes del Sahel, en 2021, el UNISS puso en marcha una iniciativa que tenía por objeto reflejar la visión que tenía este colectivo acerca del desarrollo. Esto incluía su involucramiento en conversaciones directas (Voces del Sahel: conversaciones, perspectivas y soluciones) sobre cómo las Naciones Unidas pueden colaborar mejor con la juventud para cambiar la imagen negativa que se tiene del Sahel.

El voluntariado acerca a las distintas generaciones, da solución a las causas profundas del conflicto y reconstruye contratos sociales fallidos sin dejar a nadie atrás. Por ello, los gobiernos de los países del Sahel y otros asociados y asociadas que deseen alcanzar de manera significativa las aspiraciones de desarrollo del Sahel y los ODS deben aprovechar y reconocer colectivamente los esfuerzos de los voluntarios y voluntarias, facilitar apoyo y dedicar recursos e inversiones a iniciativas dirigidas por la juventud, especialmente aquellas que implican al voluntariado.

Ahora es el mejor momento para participar en el voluntariado.